Lucas Díaz Aspiroz: “Desde el vuelo perdieron mi valija y recién empecé a entrenar”
El palista olavarriense que llegó a República Checa el pasado lunes, habló con La Mañana de Radio Universidad y contó que recién este miércoles pudo unirse a los entrenamientos del equipo argentino de paracanotaje porque “me faltó 1 de las valijas y recién me llegó en las últimas horas”.
Lucas Díaz Aspiroz ultima los detalles para competir en sus segundo Juegos Paralímpicos, pero en su arribo a República Checa para sumarse al equipo nacional debió hacer frente a una inesperada situación: “Me faltó una de las valijas donde tenía la pala y demás cosas del kayak, se perdió en el vuelo. Me llegó en las últimas horas, ya a la mañana pude entrenar y estar tranquilo”.
En diálogo con La Mañana de Radio Universidad contó que debido al extravío de sus instrumentos no pudo entrenar y que “acomplejan la competencia, pero sabiendo que faltan pocos días también quiero aprovechar esto que queda de la mejor manera para poder llegar a los Juegos Paralímpicos”.
El representante del Club Estudiantes hizo mención a un día en República Checa que incluye mucho entrenamiento en el agua para llegar de la mejor manera a Tokio a pesar de una lesión lumbar que complicó sus últimas semanas de preparación en Olavarría: “La lesión no me permitía entrenar porque el dolor era muy intenso, pero gracias a los profesionales de la salud que tenemos en Olavarría que me dieron una mano para estar de la mejor manera, ya puedo entrenar y cuando vuelva tendré que tomar cartas en el asunto para solucionarlo, pero hoy las expectativas son diferentes a las de hace un par de meses”.
“Sé que no llegó de la mejor manera, pero voy a dejar todo para tratar de llegar a la Final A, es difícil pero no imposible”
Díaz Aspiroz que vivirá su segunda experiencia paralímpica no obvió hablar de la actuación de Agustín Vernice: “Es increíble lo que hizo, el que no conoce mucho de este deporte quizá no toma noción de lo que hizo Agustín porque la verdad que estar ahí entre los 8, fue es grandísimo”, antes de agradecer las incansables muestras de afecto.