“Tenemos que ser inteligentes en la revancha, no podemos regalar nada”
Fue una de las frases que dejó Sergio De Arzave luego del contundente triunfo de su equipo ante Alumni Azuleño por la ida de los octavos de final del Interligas. “El arco se abrió y logramos sacar una buena diferencia”, destacó.
Vigente a sus 45 años, Sergio De Arzave fue una de las figuras en la goleada 4 a 0 de Municipales sobre Alumni en el marco de los primeros noventa minutos de la serie de octavos disputados en el estadio Domingo Colasurdo. “El arco se abrió en pocos minutos, logramos sacar una buena diferencia”, dijo el defensor una vez culminado el partido.
Antes de los goles, los primeros cuarenta y cinco minutos fueron trabados y con pocas situaciones de gol: “Salimos los dos a ver que tenía cada uno, el campo de juego estuvo difícil. Alumni es un equipo que intenta jugar bien al fútbol”, comentó el autor del segundo tanto y continuó después: “En el segundo tiempo nos animamos más y después del primer gol logramos destrabar el partido”, analizó.
“En el grupo confiamos en todos, quedo demostrado que cualquiera que entre va a dar lo mejor que tiene. Estamos todos subidos a este carro con el sueño de llegar lo más lejos posible”
Por otro lado, más allá de la abultada ventaja, el ex El Fortín y San Martín se mostró cauto ante los próximos noventa minutos en Azul: “Tenemos que ser inteligentes en la revancha, no podemos regalar nada. Iremos sabiendo que necesitamos del sacrificio, humildad y mucho carácter para poder estar arriba”, manifestó.

En último lugar, se tomó un tiempo para hablar sobre el golazo que hizo: “Por un momento me agarra una emoción muy grande porque hago mucho sacrificio y me gusta”, confesó Sergio y posteriormente enlazó: “Esta vez me tocó en un puesto raro para mí, lo único que quería era cumplir en defender y me tocó esa jugada que cuando entró me volví loco porque ni siquiera sé cómo se festejan los goles. Lo importante es que sirvió para sumar”, culminó.